Esta tarde, después de quedarnos la semana pasada con ganas de hacer senderismo, nos hemos reunido para poder hacer esta divertida actividad.
Nuevas personas han vivido esta esperiencia. Laura y Raúl Jiménez. Carmina ha vuelto a venir con nosotros. También hemos asistido Sandra ( que al final se ha decidido), Carlos Marcas y Rojano, los armados del grupo Marc y Borja y por último yo (Ana Belén).
También han venido dos personas más, entre ellas Raúl Manchado pero se han quedado atrás.
Nos hemos dirigido a la casa del misterioso señor de las mandarinas ( que fuimos el 6 de mayo de este año). Nos deparaba un destino cruel, nada más entrar una cabeza cortada de un muñeco. Hemos pasado por el círculo donde hacen los malefícios, como dice Marc, el pozo, la casa... En el círculo se habían unas bragas con manchas sospechosas marrones. Todos exclamamos: ¡Qué asco! Pero ni rasto de ese hombre.
Dejando atrás a aquel horrendo lugar nos hemos dirigido por un camino lleno de chumberas y nos dirigimos por un camino diferente. Su final... bueno... era el lavabo de aquel señor. Sus pañuelos marrones indicaban. Subimos hasta llegar casi a San Gerónimo. Casi, casi pero al llegar arriba, Borja y Marc nos informaron de habían visto al extraño señor con los pantalones bajados y un tanga cerca de su evidente retrete. Bajamos para seguirle pero arriba nos esperaba un guarda o eso parecía. Le saludamos y se fue. Intrigados bajamos otra vez.Vimos a un pájaro carpintero pero, antes de que Carmina y Laura le hicieran una foto se fue volando. Descendimos encontrando todo tipo de objetos de aquel hombre: las revistas que lee; su ropa, entre ellas unas manoplas, sus guantes y su abrigo de bisón; sabemos que está aprendiendo inglés, que come pájaros...Ahí lo dejo...
Después de dejar al pobre señor de las mandarinas nos hemos dirigido al depósito ya que se nos echaba el tiempo encima. Raúl J. Moreno ha sido malote al colarse en aquel lugar cerrado con candado. Tras todo el camino huyendo de los balinazos y piñazos de Marc y Borja, Rojano se ha adelantado al grupo para evitar los lanzamientos. En el cruce donde se ha ido pasaba un hombre con muletas. Al ir en busca de Carlos nos hemos parado ya que no sabíamos si había huido por Borja o el hombre de las muletas. Finalmente, ha venido nuestro amigo y hemos seguido la ruta. Hemos tenido que darnos la vuelta pero después de un rato hemos llegado a la Bastida. Nos hemos hecho una foto donde yo salgo diciendo "Borja os va a matar a balinazos". Hemos saltado en una especie de colchoneta y nos hemos dirigido a casa.
Nos lo hemos pasado también que hemos dicho de repetir la semana que viene.
PD: Mirza se ha presentado finalmente a las cuatro y tras una espera de media hora se ha dirigido al bar del Chen. Esperamos que se venga la próxima semana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario